Habían quedado a las 6 de la tarde, era el primer encuentro para ambos, ella se preparo a conciencia el cuero y la seda predominaban en su atuendo, el cual como era habitual en ella solo insinuaba, el ultimo toque fueron las botas y los guantes, se echo una mirada en el espejo, y sonriendo para si misma pensó que estaba impresionante, fue preparando lo que iba a utilizar con el, poca cosa eso si, pero lo que más le satisfacía a ella, cuerdas el gato palmeta fusta etc. etc., encendió algunas velas y puso la estancia en penumbra, poco antes de la hora fijada el timbre de la puerta sonó, abrió y vio que él llegaba como le había ordenado, aun así le hizo esperar unos minutos, cuando por fin le permitió la entrada, comprobó con gran satisfacción que él había hecho todo lo que ella le había ordenado, le hizo pasar a la habitación, noto como el se tensaba, en ese momento ella le dio las primeras instrucciones que el fue cumpliendo displicente, con la cabeza baja y la mirada en el suelo, pero eso solo seria por un instante, porque sabia que en un momento perdería toda visión y movimiento, le tenia donde y como ella quería tenerle, la sala empezó a llenarse de olores y sonidos, la voz de ella susurrante apenas imperceptible le iba dando ordenes, empezaba la educación y doma de su sumiso, ahora ya le podía denominar así, la tarde y la sesión avanzaban, y ella a su vez también lo iba haciendo, despacio con cautela, como a ella le gusta hacer las cosas, en un momento dado ella liberó sus manos, y le ordenó que se pusiera a cuatro patas, a la luz titilante de las velas, comprobó como las marcas y los restos de cera se apreciaban claramente en la piel de él, lo que la satisfizo
Ella había apreciado que el era un buen alumno, silencioso y entregado, y decidió avanzar un poco más............ continuará
